Esta mañana hemos querido celebrar Una sencilla fiesta de Navidad con los voluntarios de Caritas y todos lo que acuden a la parroquia en busca de ayuda. Un sencillo desayuno con el que compartir juntos la alegría del nacimiento del Niño Dios.
La alegría de compartir Misa y mesa une lazos entre todos.
Durante la celebración y tras unas palabras de agradecimiento de los beneficiarios por el trabajo de todo el año de los voluntarios hicimos entrega de cincuenta lotes compuestos por un jamón y otros embutidos como parte del reparto extraordinario de este mes de diciembre.
El mejor de los regalo no es material sino la fraternidad y el amor que se respiraba en el encuentro. Queremos agradecer su generosidad a la familia que hizo posible esta entrega y que, como cada año, quiso acompañarnos en este día.