Parece que ha venido para quedarse. Por quinto año consecutivo, los católicos estamos invitados a secundar la iniciativa del Papa Fracisco para acompañar al Señor durante 24 horas el viernes y sábado que anteceden el IV domingo de Cuaresma, o lo que es lo mismo, hoy y mañana
Esta iniciativa nació con el intento de volver a poner en el centro la importancia de la oración, de la adoración eucarística y el don del sacramento de la reconciliación, querida fuertemente por el Sucesor de Pedro.
En su Mensaje de Cuaresma 2018 titulado “Al crecer la maldad se enfriará el amor en la mayoría”, invita a todos los fieles a vivir como una «ocasión propicia la iniciativa que invita a celebrar el Sacramento de la Reconciliación en un ambiente de adoración eucarística».
Celebrar la penitencia en ese marco nos permitirá experimentar en carne propia la grandeza de la misericordia. Será para cada penitente fuente de verdadera paz interior.