Esta semana, voluntarios de Cáritas de las parroquias del entorno de La Coruña -Cambre, Vilaboa, O Burgo, Mera y Santa Cruz-, mantuvieron un encuentro con el Director Diocesano Anuncio Mouriño en el que este les presentó el nuevo protocolo de atención de las Cáritas particulares.
Tras este título tan “sonoro” se encuentra un trabajo de cinco años de los técnicos de Cáritas que intenta dar respuesta a los interrogantes que,
los agentes que trabajan en las parroquias, planteaban con frecuencia, pues aquellos que están en primera línea para acoger, escuchar y acompañar, desean hacerlo del mejor modo posible.
Se trata, en definitiva, de unificar criterios en el modo de actuación para mejorar la acogida, el trato y agilizar las respuestas a las dificultades y necesidades de cuantos acuden pidiendo ayuda.
En palabras del Papa Francisco, los voluntarios de Cáritas son “las manos de Cristo”; personas que no quedan indiferentes ante el sufrimiento de su prójimo y se movilizan, se ponen manos a la obra. Nosotros podemos hacerlo de modo práctico marcando las dos casillas de la X en nuestra declaración de la renta para ayudar a la Iglesia y a Cáritas.