El sábado 27 de abril la Iglesia nueva de Santa Cruz fue testigo de un encuentro cargado de nostalgia. Este curso se cumplen cincuenta años de la fundación – por el recordado párroco de Santa Eulalia de Liáns D. Manuel García Calviño- del Colegio Santiago Apóstol, un proyecto parroquial que acogió a niños y jóvenes de numerosos ayuntamientos de la
Provincia. Con tal motivo un numeroso grupo de antiguos alumnos celebraron un emocionada jornada cargada de actividades.
En el año 1969 llegó la primera promoción a la que le sucederían veinte más, hasta 1989, fecha del cierre del centro. Las horas compartidas de estudio y de convivencia en el internado ha creado un vínculo con todos los alumnos que han pasado por sus aulas que se mantiene a lo largo del tiempo.
El centro supuso un hito en su tiempo pues llegó a albergar seiscientos internos entre alumnos de E.G.B. y las diferentes ramas de Formación Profesional: automoción y metal.
Lo que hoy son los locales parroquiales en su día también albergó un centro de estudios para chicas donde se formaban como Administrativas.
El encuentro comenzó con la celebración de la Eucaristía presidida por D. Ovidio Currás, sacerdote que llegó al Centro en el año 1979 y ocuparía el cargo de profesor y formador.
Tras la Misa, los ex-alumnos vistieron las antiguas instalaciones donde pasaron su infancia y juventud que hoy alberga el
Centro de Menores “Lar a Mercé”, un centro residencial de protección de menores que, pertenece a la Congregación de “Hermanas Mercedarias de la Caridad” que son las “herederas” de este hermoso proyecto social de formación y promoción humana que supuso en su día el Colegio Santiago Apóstol.
Se da la circunstancia de que algunas de las hermanas, Sor Maria Rosa y Sor Florentina que comenzaron la labor junto a D. Manuel y que supusieron el “alma” del centro, todavía hoy continúan trabajando en la asistencia a niños y jóvenes en nuestra comarca.
Y tras la misa ¡La mesa! Un almuerzo fraterno en el que no faltaron las risas y los recuerdos siempre vivos en el corazón y la memoria de los asistentes.
Les felicitamos por este aniversario agradecemos que sigan llevando a nuestra parroquia en el corazón después de toda una vida.