La Iglesia nueva de Santa Cruz abría sus puertas muy temprano para recibir a los más pequeños de la parroquia que, en el marco de la celebración del Mes de Mayo, portaban las flores que adornarían la imagen de la Virgen que preside el altar de Santa Cruz estas semana,-
Los niños nunca defraudan y menos a su madre. Allí estaban el domingo, decenas de ellos, con sus ramos de flores y su alegría y jovialidad características.
Tras la homilia y ofrecimientos a la Virgen de nuestro párroco, D. Jose Carlos Alonso explicando el significado del acto y la importancia en el seno de la familia, de la devoción y piedad marianas. Algunos cantos, unas peticiones y las ofrendas de los niños: flores, su corazón y un buena obra…
Decenas de pequeños y pequeñas, con edades comprendidas entre los 0 y 10 años, acompañados por sus madres y padres, abuelos y abuelas y catequistas , participaban en la tradicional ofrenda.
Tras rezar todos juntos fueron pasando por el presbiterio, lo más cerca posible de la Virgen, con sus catequistas o papas-mamás para entregar el regalo a la Señora, y junto con el presente. ofrecerse a Ella.