La Iglesia celebra el domingo 19 de marzo, solemnidad de San José, el Día del Seminario, este año con el lema «Levántate y ponte en camino». Sin duda esta jornada se presenta como una ocasión para pedir, dar gracias y mostrar nuestra cercanía con los seminaristas, sus formadores y las vocaciones sacerdotales.
El papa Francisco en el 2020 escribió un mensaje que puede iluminar nuestros corazones a encontrar un camino de servicio en el ministerio sacerdotal a aquellos que se sientan llamados a seguirle:
“Deseo que la Iglesia recorra este camino al servicio de las vocaciones abriendo brechas en el corazón de los fieles, para que cada uno pueda descubrir con gratitud la llamada de Dios en su vida, encontrar la valentía de decirle ‘sí’, vencer la fatiga con la fe en Cristo y, finalmente, ofrecer la propia vida como un cántico de alabanza a Dios, a los hermanos y al mundo entero.
El Señor sabe que una opción fundamental de vida requiere valentía. Él conoce las preguntas, las dudas y las dificultades que agitan la barca de nuestro corazón, y por eso nos asegura: No tengas miedo, ¡yo estoy contigo!. La barca de nuestra vida avanza lentamente, siempre inquieta porque busca un feliz desembarco, dispuesta para afrontar los riesgos y las oportunidades del mar.
Los que están llamados a seguir al Maestro de Nazaret, deben decidirse a pasar a la otra orilla, apostando valientemente por abandonar sus propias seguridades e ir tras las huellas del Señor. Nuestra realización personal y nuestros proyectos de vida no son el resultado matemático de lo que decidimos dentro de un ‘yo’ aislado; al contrario, son ante todo la respuesta a una llamada que viene de lo alto. Toda vocación nace de la mirada amorosa con la que el Señor vino a nuestro encuentro, quizá justo cuando nuestra barca estaba siendo sacudida en medio de la tempestad”
Papa Francisco, Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones (24-04-2020)