Pero… ¿Estamos respondiendo a la llamada a la
conversión?
Hace unas semanas, comenzamos ultima semana de esta Cuaresma que estamos viviendo y que culminará la próxima semana con la celebración del Triduo Pascual.
Han sido días de preparación para la Pascua. La Cuaresma es un camino hacia la Pascua de Resurrección. Y es una buena ocasión para que hagamos un parón para mirar en nuestro interior si de verdad estamos respondiendo a la llamada a la conversión que se nos hace en este tiempo.
En realidad toda la vida del cristiano ha de ser vivida como un camino de conversión. Somos peregrinos, y a veces, hemos de emprender de nuevo el camino.
Estamos ya en la recta final y quizás es un buen momento para preguntarnos:
¿Cómo estoy viviendo este tiempo de conversión?
¿Tengo el corazón dispuesto para vivir con paz y alegría el misterio central de nuestra Fe?
Aún es tiempo, si no lo hicimos en su comienzo, para dedicar un poco de atención a este tiempo cuaresmal. Que nada nos distraiga del profundo significado que para nosotros los cristianos, tienen esos días santos.
Vivamos el tiempo que queda hasta la Pascua con entrega, con amor, con generosidad, pero sobre todo con oración.