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Se cumplen siete años del fallecimiento del que durante mas de seis decadas estuvo al frente de nuestra parroquia, D. Manuel Garcia Calviño, un sacerdote humano, sencillo y humilde en sus palabras y obras.
Su sacerdocio es una entrega total a Dios y a los demás en su ministerio. Su actividad pastoral se centró especialmente en la atención a los jóvenes más necesitados y también a toda persona que acudía a él en busca de ayuda, tanto espiritual como material. Fue su vida una vida de trabajo, y en silencio. Y en ese mismo silencio nos dejó.
Hoy en la Iglesia nueva de Santa Cruz celebraremos una misa en su recuerdo a las 19:00 horas.