En la parroquia de Santa Eulalia de Perillo estamos iniciando una serie de actividades que tienen como fin revitalizar la vida espiritual, formativa y comunitaria. Las familias son las células de la Iglesia y de la sociedad. Ellas merecen toda la atención y el cuidado. Por eso, la Parroquia organiza para ellas actividades formativas, litúrgicas, de convivencia…
Los adultos llevan el timón de sus propias vidas en la Iglesia y en el mundo. Tal responsabilidad requiere vigor material y espiritual, y en ello la Parroquia tiene mucho que ofrecerles y al mismo tiempo necesita de su colaboración. Por eso henos organizado un ciclo de charlas formativas que se imparten los miércoles (alternos) a las 19:45 hh. en los salones parroquiales de Perillo con temáticas diversas. En esta ocasión el tema elegido es la Biblia Hoy, más que nunca, debemos tener una cierta preparación para iniciar su lectura seria .
Hoy día en muchas familias católicas encontramos la Biblia como el libro sagrado de la casa. Ojalá que pronto llegue el día que cada católico sea un asiduo lector de la Escritura Sagrada.
Pero muchos que comienzan a leerla, después de algunos capítulos la dejan de lado por no comprender casi nada. Dicen que leer la Biblia les resulta difícil. Es un libro tan largo y a veces difícil, especialmente para uno que sabe poca historia y poca geografía, y no tiene costumbre de ubicar lo que lee en su propio contexto.
También se da el caso de católicos que, comienzan a leer la Biblia, y se dejan llevar por interpretaciones parciales, caprichosas y fanáticas que poco a poco lo llevan a uno a adherir, por mero sentimentalismo, a algunas de las muchas sectas bíblicas ya existentes, apartándose, por ignorancia, de la Iglesia Católica.
Y no faltan los que quieren leer toda la Biblia sin alguna explicación; o toman la Biblia como un juego de naipes abriendo el libro al azar, o saltando por aquí o por allá y piensan que Dios automáticamente les comienza a hablar. Es un riesgo muy grande; es como jugar a la suerte.
Para evitar estos peligros, no basta leer la Biblia con fe y devoción. Hay que juntar la fe, la oración y la devoción con el estudio. Leer la Biblia sin una adecuada preparación es tentar a Dios. Hay que prepararse para leerla. Si no, puede suceder cualquier cosa. La historia de nuestra fe es así.
Esta charla tiene como finalidad introducirnos en el estudio de la Biblia. Hoy, más que nunca, debemos tener una cierta preparación para iniciar una lectura seria de la Biblia. Para muchos, la Biblia sigue siendo un hermoso libro cerrado que adorna nuestra biblioteca. El problema es: ¿cómo leer, cómo comenzar con este libro? Siempre ha sido difícil la iniciación a la lectura de la Biblia. Exige de nosotros paciencia, humildad, serenidad y una cierta disciplina intelectual.
En esta clase vamos a indicar algunos consejos prácticos para comenzar el estudio de la Biblia.
Lugar: Locales parroquiales de Perillo
Día: Miercoles 20 de noviembre
Hora: 19:45 hh.